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domingo, 29 de abril de 2012
Monsters of Rock
Monsters of Rock
Personajes de una banda de rock muy pero muy pesada

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viernes, 20 de enero de 2012
Pajarito

En el rancho de Inocencio Martínez vivía un toro de la ganadería Miura, al que desde pequeño le apodaron Pajarito porque movía rápido sus orejas como si quisiera volar. Su nobleza y valentía lo hacían codiciable para varios toreros de renombre y sus admiradoras rumiaban por él, Torito tenía algunos romances con ellas, pero de la única que estaba enamorado era de una hembra muy simpática llamada Blanquita, sus piernas eran las más torneadas de todo el ganado, y su boca la más carnosa.
Cada domingo, Blanquita veía las actuaciones de Pajarito desde unas rendijas en la plaza de toros, frente a ellas mugía de emoción pero también de sufrimiento cuando era maltratado. Cuando un torero apodado Margarito, le cortó una oreja a Pajarito, Blanquita se puso muy triste, consolando a su macho con los mejores besos de lengua que jamás una cuadrúpeda hubiera dado. Aquella fue una noche de ensueño, y también la última que pasaron juntos, pues luego los alcanzó la desdicha.
Un día que Blanquita hacía su rutina de ejercicios para dar buena leche, Don Inocencio Martinez, su dueño, andaba en búsqueda de la mejor res para una suntuosa fiesta que organizaría con amigos y familiares, conocía bien a sus vacas y la musculatura de Blanquita le pareció perfecta para estrenar su moderna parrilla que había comprado en Houston Texas.
Alejado de ella, Pajarito no pudo hacer nada para defender a su amada de dos sujetos mal encarados que la llevaron a un sanguinolento establo para sacrificarla. Al enterarse de la tragedia, Pajarito lloró tanto que los ojos se le pusieron rojos varios días; su mayor deseo fue vengarse de Don Inocencio, sin embargo no lo encontró en ninguna parte del rancho, causando varios destrozos al sentir una rabia indescriptible; al tranquilizarse un poco, se le ocurrió ver a Blanquita aunque fueran sólo sus restos. Caminó melancólico hacia donde eran arrojados los cadáveres de las reses, el lugar le causó náuseas pero sobre todo indignación, muchas de las hembras que había conocido, se encontraban en estado de putrefacción; desalentado por lo deplorable del lugar, hizo un esfuerzo por identificar cuál de los cráneos era el de su querida, todos parecían tener el mismo aspecto, aunque de pronto identificó uno que tenía la dentadura incompleta, recordó que Blanquita había perdido un canino y un molar peleándose con otra vaca, así que ese era su cráneo.
su castigo fue no probar alimento
Haciéndolo rodar cuidadosamente con sus patas, el melancólico toro se dirigió a un jardín y de él arrancó la flor que a su gusto era la más hermosa. Tenía la costumbre de obsequiarle una rosa a Blanquita todos los días, y colocarla en su oreja izquierda para que la presumiera a sus amigas.
Pajarito hizo un altar para su amada, en el centro colocó su cráneo y sobre él, la delicada flor que acababa de arrancar; a partir de entonces, su responsabilidad sería cambiarla todos los días antes de que se marchitara.
Pajarito, aunque sumamente deprimido, tuvo que seguir actuando en la plaza de toros, no obstante se mostró indiferente con los toreros, provocando que la gente en vez de aplaudirle le chiflara. Las banderillas en su lomo no lograron enfurecerlo como antes, pues el dolor de Blanquita lo tenía enterrado más adentro, en el corazón.
Don Inocencio trató de distintas maneras que Pajarito volviera a ser como antes, pero lo único que consiguió, fue que éste intentara embestirlo con toda su fuerza, el ganadero se enfureció tanto por su comportamiento, que tomó la decisión de sacrificar a su mejor toro en una feria taurina inolvidable. Al anunciarse que vendría un torero muy famoso apodado el Bully, los boletos se terminaron rápidamente, habiendo una plaza de toros repleta.
Pajarito fue el último toro en aparecer pues con él representaba el momento estelar de la corrida. Caminó lentamente hasta el centro de la arena, y con cada paso se hizo más fuerte su sed de venganza, esta vez no fallaría en su ataque, buscó a Don Inocencio donde siempre se sentaba, y lo encontró bebiendo una cerveza acompañado de amigos.
Pajarito entonces no quiso esperar a que el Bully empezara siquiera a torearlo, sino que corrió a todo galope hacia su único objetivo. Le tomó más de una semana aprender a brincar, pero gracias a eso sus patas delanteras se separaron de la tierra más de un metro, las traseras luego se apoyaron en la barrera y así logró impulsarse directo contra Don Inocencio; sus cuernos quedaron enterrados en el pecho del ganadero, quien falleció de inmediato. La sangre de su dueño escurrió por su cara hasta alcanzar su hocico, y así, saboreando ese líquido carmesí, fue como encontró su propio final al ser atravesado su pecho por una afilada hoja de metal.
El Bully trató de adivinar porque había reaccionado el toro de esa manera, sobrecogiéndolo que éste sonriera luego de enterrarle su espada. Para entonces, Pajarito acababa de despertar en una pradera repleta de flores rojas, techada por un maravilloso azul celeste; con los ojos iluminados por tal paisaje, los latidos de su corazón se aceleraron al descubrir en el horizonte a Blanquita; lucía más radiante que nunca con un bronceado perfecto, y una sonrisa a la que no le faltaba un sólo diente.
lunes, 30 de agosto de 2010
Campaña BTL para talleres automotrices
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivs 2.5 Mexico.
La campaña lleva por nombre
"La oración del automovil y se enfoca en promocionar el servicio de mnantenimiento preventivo para talleres automotrices"
Fase preventiva. Vallas

Acción BTL. Monjas en la calle

Estampilla con oración del automovil


Video en la página web del taller automotriz. "La monja enseña los servicios y sus precios tatuados en su piel."

Segunda campaña: "Tu coche es como tu cuerpo"
Tiene el mismo objetivo
Valla publicitaria

Acción de guerrilla

Curitas con publicidad

Lista de precios

Anuncio en el periódico El Extra

domingo, 29 de agosto de 2010
Campaña de publicidad para Clinica Dental Bokanova
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Attribution 2.5 Mexico.
Publicidad para implantes dentales en espectaculares y vallas


Segunda campaña gráfica sobre implantes dentales


BTL para implantes dentales



BTL para brackets de zafiro en la fila de un cine

Publicidad para periódicos y revistas



lunes, 24 de mayo de 2010
Publicidad y promoción para Italian Coffee
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miércoles, 12 de mayo de 2010
Omisiones con castigo

Omisiones con castigo is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas 2.5 México License.
Figuras de fuego terminan con lo poco que queda de las construcciones humanas. Los inocentes se han ido, quedando los culpables. Nemías es uno de tantos que lo perdió todo al iniciarse la caída de la tierra, se convirtió en un ser errabundo que de repente comenzó a ver flechas pintadas en el cielo rojo, al ser invisibles para muchas personas piensa que Dios lo ha elegido para algo, y sigue con curiosidad y optimismo el camino que le indican los signos.
Al sentir mucha sed se acerca a la fuente de un parque pero ella en lugar de agua tiene latas y botellas, para su fortuna una todavía tiene líquido y lo bebe enseguida. Una gárgola que se mece en un aro lo ve y se ríe.
Nemías camina por calles desastrosas en las cuales gente en desgracia le pide ayuda pero él no se desvía de su trayecto.
Casi en una esquina encuentra un grupo de minotauros enfrentando a rebeldes que quieren salvar a la humanidad. En su mayoría son luchadores enmascarados que se defienden con sus propios puños o con las armas que han robado de sus enemigos. Nemías evita que lo vean y pasa de largo, prefiere no voltear a los lados para no descubrir abusos y crímenes; como a él no le pasa nada intuye que Dios lo protege.
Luego de casi un kilómetro, distingue otra flecha que flota casi pegada a un rascacielos, debe medir diez metros de largo y le señala ir a la derecha, espera que esté cerca el final y la recompensa que Dios le tiene preparada.
Antes que eso suceda lo espanta la estruendosa sirena de un coche de bomberos, el vehículo viene a toda velocidad y desvía también a la derecha, frena justo enfrente de un supermercado en el que hay gente atrapada entre las llamas.
El conductor actuó alguna vez en un circo y junto a otros payasos intenta sofocar el fuego con cientos de litros de refresco. La gente congregada alrededor pide sean rescatados sus amigos y familiares.
Nemías quiere ayudar, pero adelante distingue un ovalo negro con resplandor azul alrededor, decide no detenerse e ir hacia él. Sus pies apenas tocan el asfalto y su corazón late con fuerza al ver que lo que está en medio de la avenida es una puerta dimensional.
Al llegar a él ve del otro lado a su esposa e hijos, quiere reunirse con ellos pero al intentar cruzar la puerta ésta le niega el acceso.
Se escucha la voz tenebrosa del guardián del umbral y decide que Nemías no pueda escapar de la tierra, el motivo no haber ayudado o defendido a ninguna de las personas a las que Dios los guiaba con las flechas.
El portal se cierra y Nemías debe esperar otra oportunidad.
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